uat tini uaz zaitun.
Por el fruto de la higuera y del olivo.
del tafsir de Al qurtubi:
Dijo Abu Dharr: “Regalé un cesto de higos al Profeta (saws), y dijo: “¡Comed!”. Los probó y
dijo a continuación: “Si dijera que un fruto ha bajado del Jardín, sería éste, porque los frutos
del Jardín no tienen huesos. Comedlos pues, ya que cortan las hemorroides, y alivian el dolor
de las articulaciones”. De Muadh: “Usaba él como siwák una varita de olivo y dijo: Oí decir al
Profeta (saws): “¡Qué bueno es el siwák del olivo!; del árbol bendito que perfuma la boca y blanquea
los dientes. Es mi siwák y el de los profetas anteriores a mí”.
Se relató de Ibn Abbás: “At-tin” (los higos) es la mezquita de Noé, sobre él la paz, que
se construyó en el monte de el Yudi donde se posó el arca, y az-zaitun (las aceitunas) es la
mezquita de Jerusalén”.
Dijo Ad-Dahháq: “Hace referencia a las mezquitas sagradas de Meca y de Jerusalén,
respectivamente.
Ibn Zaid: “At-tin es la mezquita de Damasco; y az-zaitun es la mezquita de Jerusalén”.
Qatada: “At-tin es la montaña sobre la que se asienta Damasco; y az-zaitun es la montaña
sobre la que se asienta Jerusalén”.
Dijo Muhammad ibn Kaab: “At-tin es la mezquita construida para los compañeros de
la cueva, y az-zaitun es la mezquita de Elías”.
Se ha dicho: “Corresponde a dos montañas de Sham llamadas monte del aceite o del
olivo, y monte de los higos (en lengua siriaca)”. Y esto es porque se dan allí de forma abundante.
La primera de las referencias, es decir, la que alude a los frutos, es la más correcta porque
corresponde al significado real. Y el significado real no se desvía hacia el sentido figurado
si no es por una indicación o prueba manifiesta (dalíl). Y Alláh, el Altísimo, juró por los higos,
porque con sus hojas se cubrió Adán en el Jardín. Como dice el Altísimo:
“Se cubrieron con hojas del Jardín”. (Al-Aaráf-
7:22)
Y eran hojas de higuera. Se ha dicho: “Ha jurado por el fruto de la higuera debido al
gran beneficio que reporta al hombre: pues, es de aspecto hermoso, de buen sabor, de un olor
que se propaga, de fácil recolección y de buenas proporciones”.
Al mismo tiempo, Alláh, el Altísimo, juró por la aceituna porque se la puso como ejemplo
a Ibrahím cuando dijo en el Corán:
“Se enciende gracias a un árbol bendito, un olivo...”.
(La Luz-24:35)
La aceituna constituye el condimento principal de la gente desde Sham hasta el Magreb
para sus comidas utilizándola en sus guisos. Su aceite es empleado para alumbrar y es
muy utilizado en medicina para curar males de estómago, úlceras y heridas. En definitiva,
tiene múltiples beneficios. Dijo de él el Profeta (saws): “Alimentaos de aceite de oliva y untaros la
piel con él, porque ciertamente es de un árbol bendito”.
Dijo Ibn al-Arabí que por la gracia de Alláh, el Altísimo, y los beneficios que ha puesto
en el fruto de la aceituna, y que ésta constituye un alimento y una reserva, es obligatorio pagar
el zakat sobre dicho alimento.